
APV para independientes
Ser trabajador independiente ofrece una gran libertad, pero conlleva también grandes desafíos, sobre todo financieros. Ya sea por recibir ingresos variables o por no contar con un empleador que gestione tus ahorros para la jubilación, planificar el futuro puede ser aún más difícil.
Este punto es tan relevante que, desde 2019, los trabajadores independientes que emiten boletas de honorarios y no cotizan de manera independiente, tienen la obligación de cotizar en el Sistema de Seguridad Social.
Trabajar de manera independiente requiere de planes de ahorro ajustados a las circunstancias de cada uno, y el Ahorro Previsional Voluntario (APV) puede ser una herramienta clave en esa estrategia.
El APV te permite ahorrar de manera adicional para mejorar tu pensión según tu realidad, y beneficiarte de incentivos fiscales en el camino. Este te permitirá cubrir lagunas previsionales, o compensar periodos de menores ingresos.
¿Por qué APV?
1. Flexibilidad en los aportes
No estás obligado a hacer aportes fijos mensuales. Puedes ajustar la cantidad que decidas ahorrar según tus ingresos cada mes. Prioriza el ahorro en los meses de mayores ingresos y, en meses más ajustados, puedes disminuirlos o incluso hacer una pausa temporal. Esta flexibilidad es clave para mantener la constancia a largo plazo.
2. Ahorro a largo plazo a tu medida
Te permite elegir entre distintos tipos de fondos mutuos, dependiendo de tu tolerancia al riesgo y tu horizonte de ahorro. Si te quedan muchos años antes de jubilarte, quizás te interese un fondo más agresivo que te ofrezca mayores rendimientos a largo plazo, mientras que, si prefieres estabilidad, un fondo conservador será más adecuado. Además, siempre puedes ajustar la estrategia.
3. Beneficios tributarios ajustados a tu situación
Puedes elegir entre diferentes regímenes tributarios para recibir beneficios del Estado:
• Régimen A: el Estado te bonifica un 15% del total que invertiste en APV durante el año (con un tope de 6 UTM). Te conviene elegir este régimen cuando tu ingreso mensual es menor a $4.000.000.
• Régimen B: los aportes que hagas rebajan la base imponible del año en curso (límite anual de 600 UF) y en la declaración de renta que debes realizar en abril de cada año obtienes un beneficio tributario que permite reducir tu pago de impuestos. Es una opción interesante si actualmente pagas impuestos en un tramo más alto.
Con APV tú decides cómo, cuándo y cuánto ahorrar, lo que te permite tomar decisiones financieras que se alineen con tus planes de vida.
¿Cómo comenzar un APV?
1. Evalúa tu situación actual: revisa tus ingresos promedios y los meses que recibes mayores y menores ingresos. Entender estos patrones te ayudará a definir cuánto puedes destinar al APV.
2. Selecciona un administrador de APV: existen muchas opciones. Puedes elegir entre bancos, compañías de inversiones o administradoras de fondos de pensiones. Lo importante es que se ajuste a tus necesidades.
No importa si tus ingresos son variables o si recién estás comenzando a pensar en la jubilación: el APV permite ajustar tus ahorros según tu realidad y obtener beneficios fiscales.
¡Mientras antes comiences a ahorrar, más tiempo se rentabilizarán tus ahorros!
Los planes de Ahorro Previsional Voluntario son ofrecidos por Banchile Administradora General de Fondos S.A. y Banchile Corredores de Bolsa S.A. La rentabilidad es fluctuante, por lo que nada garantiza que las rentabilidades pasadas se mantengan en el futuro.